En pleno corazón de Boyacá, entre los verdes valles y las montañas andinas, se vive cada año una celebración única en Colombia y Latinoamérica: la Tomatina de Sutamarchán. Esta fiesta popular, inspirada en la famosa Tomatina de Buñol (España), ha sabido reinventarse con identidad local y convertirse en un evento cultural de gran impacto social, económico y turístico. En 2025 regresa en su edición número 15 con más actividades, más visitantes y más tomates.
¿Qué es la Tomatina Sutamarchán?

La Tomatina Sutamarchán es mucho más que una guerra de tomates. Es una fiesta colectiva que simboliza la unión, la alegría y la tradición agrícola de una comunidad boyacense orgullosa de su producto estrella: el tomate. La actividad principal consiste en una batalla amistosa donde se lanzan tomates maduros no aptos para el consumo humano, en un espacio seguro y controlado. Pero la Tomatina es también comparsas, disfraces, conciertos, juegos tradicionales y ferias gastronómicas.
Desde sus inicios, la Tomatina colombiana ha servido como una plataforma para visibilizar la vocación agrícola de Sutamarchán y para dinamizar su economía a través del turismo cultural. Lo que empezó como una iniciativa local ha logrado posicionarse como un evento reconocido en medios nacionales e internacionales, atrayendo cada vez a más visitantes.
¿Cuándo se celebra la Tomatina 2025?
La Tomatina Sutamarchán 2025 se celebrará durante el primer puente festivo de junio, del 31 de mayo al 2 de junio. Este fin de semana coincide con la celebración del Día del Sagrado Corazón en Colombia, lo que garantiza una alta afluencia de turistas.
Este año, el evento retoma su programación después de algunas suspensiones causadas por factores climáticos y la pandemia. Para Sutamarchán, esta edición número 15 representa no solo una celebración simbólica sino también una oportunidad para consolidar su oferta turística.
Programación de la tomatina en Sutamarchán 2025

La Tomatina se ha convertido en un festival de tres días que combina deporte, cultura, folclore, gastronomía y turismo rural. Esta programación busca integrar a todos los públicos: niños, adultos, familias, turistas extranjeros y locales.
Sábado 31 de mayo: el inicio de la celebración
El primer día del festival está dedicado a actividades recreativas, deportivas y culturales:
- Juegos tradicionales como encostalados, carreras de cucharas y trompo, que rescatan costumbres campesinas y fomentan la integración familiar.
- Carrera atlética abierta a todas las edades, que recorre rutas escénicas del municipio y promueve el deporte como parte de la vida rural.
- Ciclopaseo familiar, ideal para quienes desean disfrutar de los paisajes boyacenses en bicicleta.
- Cabalgatas, con participación de caballistas locales y visitantes, en un recorrido que conecta lo ancestral con lo turístico.
- Por la noche, una verbena popular reúne a la comunidad en la plaza principal con música en vivo, gastronomía típica y ambiente festivo.
Domingo 1 de junio: la gran Tomatina
Este es el día más esperado. El evento central comienza desde la mañana con un desfile lleno de color y creatividad:
- Comparsas, bandas musicales, zancos y carrozas recorren las calles de Sutamarchán con temáticas alusivas al tomate, la agricultura y la identidad boyacense.
- La Tomatinita, una versión infantil del evento principal, permite a niños de hasta 10 años participar en una batalla segura y controlada, fomentando el respeto, el juego y la inclusión.
Por la tarde se realiza la esperada Tomatina para adultos, donde se lanzan alrededor de 45 toneladas de tomate maduro durante 45 minutos. La participación está abierta a todos, siempre y cuando porten la camiseta oficial del evento. Esta experiencia es pura adrenalina, diversión y fotografía viral.
Después de la tomatina (Batalla de tomates):
- Los Bomberos Voluntarios de Villa de Leyva y Tunja realizan el lavado colectivo de los asistentes, generando un segundo momento festivo.
- Se organizan brigadas de recolección de residuos, en una dinámica ecológica que premia a quienes ayudan a limpiar.
- La jornada finaliza con un espectáculo de fuegos artificiales y conciertos con orquestas en vivo en el estadio municipal.
Lunes 2 de junio: concursos y cierre festivo
El último día se reserva para concursos creativos y lúdicos:
- Tomate más grande y más sabroso: premios para productores locales que destacan por su calidad.
- Concursos como los encostalados, concursos de baile y comidas típicas.
- Un cierre perfecto para quienes buscan un día tranquilo antes de regresar a casa.
¿Cómo participar en la Tomatina?
El acceso al evento principal está condicionado únicamente a portar la camiseta oficial, que puede adquirirse en puntos autorizados del municipio o en el estadio por un valor cercano a los 15.000 pesos colombianos.
Los niños deben ir acompañados por adultos y participar solo en la Tomatinita, una actividad exclusiva para su seguridad.
Recomendaciones para disfrutar la Tomatina de Sutamarchán
Para vivir esta experiencia al máximo y de manera segura, es fundamental tener en cuenta algunas recomendaciones que facilitarán la participación y garantizarán la diversión sin contratiempos.
Llevar ropa cómoda y que no importe manchar o dañar
Durante la Tomatina, los participantes se lanzan toneladas de tomate, por lo que la ropa quedará completamente manchada y posiblemente deteriorada. Se recomienda usar prendas viejas o que no se quieran conservar, preferiblemente de algodón para facilitar la transpiración. Además, es importante calzar zapatos cerrados y cómodos que puedan mojarse y ensuciarse sin problema.
Proteger los ojos con gafas adecuadas y evitar objetos duros
El tomate puede irritar los ojos si entra en contacto directo, por lo que es aconsejable llevar gafas protectoras o de natación para evitar molestias y posibles lesiones. También se debe evitar usar objetos duros o punzantes que puedan lastimar a otros participantes, pues la actividad es completamente lúdica y debe primar la seguridad de todos.
Utilizar bloqueador solar y mantenerse hidratado
Aunque la Tomatina se realiza en horas de la tarde, la exposición al sol puede ser intensa, especialmente en junio. Es importante aplicar bloqueador solar resistente al agua antes de llegar al evento y reponerlo según sea necesario. Además, llevar una botella de agua para mantenerse hidratado es vital, ya que la actividad física y el clima pueden causar deshidratación.
No consumir alcohol antes ni durante la actividad
Participar en la Tomatina requiere estar alerta y consciente para evitar accidentes o conductas inapropiadas. El consumo de alcohol puede alterar el juicio y poner en riesgo la seguridad propia y de los demás. Por eso, está estrictamente recomendado no beber antes ni durante la fiesta.
Seguir las indicaciones de los organizadores y personal de apoyo
El evento cuenta con la coordinación de un equipo que vela por el bienestar de los asistentes. Es fundamental respetar las reglas, atender los avisos y colaborar en la limpieza después de la actividad para contribuir a la conservación del espacio y el éxito del evento.
Comprar la camiseta oficial y portarla durante la actividad
Para ingresar a la Tomatina es obligatorio portar la camiseta oficial, la cual está diseñada para identificar a los participantes y garantizar un ambiente organizado. Esta camiseta se puede adquirir en puntos autorizados dentro del municipio por un costo accesible.
Impacto social y económico de la tomatina
La Tomatina no es solo una fiesta. Es una muestra concreta del potencial de las festividades populares como motor de desarrollo. Desde la consolidación del evento, Sutamarchán ha fortalecido su identidad como zona productora de tomate bajo invernadero, mejorando sus índices de empleo, educación y calidad de vida.
Según Heiner Suárez, creador del evento:
“La implementación de tecnologías agrícolas y la organización comunitaria han permitido reducir los índices de pobreza. El tomate es un cultivo familiar donde se recoge producto dos veces por semana. Es el sustento de muchas familias que hoy ven a sus hijos en universidades y que tienen desarrollo y progreso en su tierra”.
Además, el evento ha impulsado una economía circular, ya que los tomates no aptos para consumo son utilizados en la actividad y luego los residuos son recolectados casi en su totalidad.
Reconocimiento internacional y proyección turística

A lo largo de los años, la Tomatina Sutamarchán ha captado la atención de medios nacionales como El Tiempo, Semana y Boyacá Sie7e Días, pero también de medios internacionales. Esto ha generado un crecimiento del turismo extranjero y un posicionamiento como destino alternativo y cultural en Colombia.
Agencias de viaje y blogs de turismo ahora incluyen la Tomatina como una experiencia auténtica, ideal para mochileros, viajeros ecológicos y quienes buscan rutas fuera del turismo tradicional.
¿Cómo llegar a Sutamarchán?
Sutamarchán está ubicado a 180 km de Bogotá, en la provincia de Ricaurte, Boyacá. Se puede llegar por dos vías principales:
- Vía Chiquinquirá – Tinjacá – Sutamarchán (más corta y escénica).
- Vía Tunja – Villa de Leyva – Sutamarchán (mejor señalizada y con más opciones de parada).
Desde Bogotá salen buses hacia Villa de Leyva o Chiquinquirá con alta frecuencia. Desde esos municipios se puede tomar transporte local hacia Sutamarchán.
Consejos para aprovechar al máximo la experiencia
- Hospédate cerca: Villa de Leyva, Santa Sofía y Tinjacá ofrecen alojamientos para todos los presupuestos.
- Prueba la gastronomía local: la longaniza de Sutamarchán, el arequipe de uva y los jugos naturales de tomate son imperdibles.
- Apoya el comercio local comprando artesanías, camisetas y productos agrícolas.
- Llega temprano para conseguir un buen lugar, especialmente el domingo.
- Lleva cámara o celular protegido, porque cada instante es digno de compartir.
La Tomatina Sutamarchán 2025 no es solo una fiesta de tomates. Es la expresión viva de una comunidad que encontró en su cultivo más simbólico una forma de transformar su realidad. Con alegría, organización y visión, han convertido esta batalla simbólica en una herramienta de progreso, inclusión y turismo sostenible.
Asistir a la Tomatina es más que lanzarse tomates: es entender cómo el trabajo colectivo puede crear cultura, dinamizar la economía y proyectar un territorio al mundo. En junio, Sutamarchán no solo se pinta de rojo, se pinta de esperanza, sabor y orgullo boyacense.